LA BELLEZA
El sol cae tras las montañas desnudas de Almería.
Tus ojos verdes irradian serenidad,
y tu piel resplandece,
anaranjada.
Han nacido florecillas blancas en la arena.
- Fíjate bien. A partir de ahora son segundos lo que tarda en desaparecer el sol.
Nos detenemos.
Juntos,
compartimos con la maravilla que nos rodea
la solitaria experiencia
de abandonarse al atardecer...
Cada día las piedras se emocionan con este instante.
Y como ellas, yo.
Y antes la tierra,
y el mar.
Y tantísimos seres que,
a lo largo de la historia del mundo,
han sentido
lo que tantos humanos también han pintado,
fotografiado,
escrito
y cantado.
Entonces intuyo
que en lo puro e importante,
todos nos igualamos.
Que lo sublime nos hermana...
Y ese pensamiento
me colma de felicidad.
Me encanta la foto y lo que dices...
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